sábado, 14 de mayo de 2011

# 12 - Censura en la música



La censura en el mundo de la música ha estado presente desde multitud de puntos de vista a lo largo de la historia. Si os entretenéis en rebuscar por google acerca del tema podéis encontrar casos de censura política, informativa, sexual, por marcas registradas, por sentido común…. pero en la mayoría se trata de “proteger” las inocentes e impresionables mentes de un grupo de personas por parte de otro, más dotado de moralidad, y designado por una fuerza cósmica creadora para salvaguardar a los primeros del mal.

Sin querer entrar en las historias acerca de la cantidad de embutido que muestra la beyoncé en su último vídeo, o del número de veces que el  rapero de turno repite la palabra “fuck” más de las admisibles 60 veces por minuto, el abanico de historias sobre la censura musical  pasa por anécdotas curiosas como la que ha llevado a Canadá, ese gran país, a desaconsejar la emisión de la canción Money for Nothing de Dire Straits, por incluir en su letra la palabra faggot (maricón en la lengua de Keira Knightley). Casos como cuando durante la guerra del Golfo la BBC eliminó 'Killing on an arab' de The Cure (que cosas tienen los ingleses), o esa divertida historia de Somalia donde las milicias islamistas han prohibido la emisión de música por la radio ya que “contradice los preceptos del Islam”.


Pero en esta entrada hablaremos de la censura derivada de adorables regímenes dictatoriales como China, Esteponia, Chile, Irán o Argentina, sin olvidarme por supuesto de ese planeta aparte llamado EE.UU. Comencemos. 

Todos estamos al corriente de la fluidez de información que reina en China. Limitaciones abusivas en Internet, imposibilidad de la publicación de noticias no autorizadas, el problema del Tibet… Esto se traduce para las bandas en contratos del tamaño de listines de teléfono y una meticulosa revisión del repertorio por parte del régimen que ha hecho que artistas como Bob Dylan, Oasis, Bjork o The Rolling Stones, hayan tenido sus más y sus menos para poder tocar allí. Así, en el caso de sus Satánicas Majestades el gobierno de China objetó cinco canciones de su última gira: "Brown Sugar", "Honky Tonk Woman", "Beast of Burden", "Let's Spend the Night Together" y "Rough Justice", del álbum "Bigger Bang", debido a  que sus letras fueron consideradas provocadoras por las autoridades.




Otro país que goza de una gran salud es Irán, donde el simple hecho de buscar un bajista o batería se debe hacer como otra actividad ilegal más, es decir, visitando sótanos, antros y demás bajos fondos. Sobre este tema trata la película Nadie sabe nada de los gatos persas, cuyo director, Bahman Ghobadi, se dice que iría a la cárcel por relatar esto en caso de volver a su país.


Las cantantes femeninas iraníes no están mejor paradas y muchos clérigos musulmanes consideran pecado cualquier expresión femenina que pueda estimular sensorialmente al macho (cosa que llevo pensando yo todo lo que llevamos de buen tiempo por las calles de Madrid), con lo que las muestras de su talento en público son contadas.



Al otro lado del charco, Argentina hizo pública la lista de la dictadura donde aparecen ¨las cantables cuya difusión no son aptas para ser difundidas por los servicios de radiodifusión¨ vihte. Acá os dejo el pdf, en él que podréis observar una mal llamada censura con trovadores de la talla de Camilo Sesto o Roberto Carlos, y otra ya puesta con más mala leche que afectaba a Cocaine, de Eric Clapton, Another Brick in the Wall, de Pink Floyd o Tiéndete, haz el amor (translate fron de inglis versión por los pibitos), de Queen, entre otros.




Y Chile, ¡ay Chile!, otra de esas grandes de Latinoamérica atenazada por un generalísimo, del que por cierto e irónicamente se dice que era amante de la canción de Nino Bravo Libre (en el fondo nunca se llegó a coger el sentido del humor de este hombre). De los años en los que “Tan Augustito” lideraba a los chilenitos, he encontrado esta joya que no voy a destapar hasta que la leáis. A los heavies de raza os va a encantar.

Y, cómo no, el momento patrio tenía que llegar. Tema sobre el que podéis encontrar abundante información, así que no me voy a explayar en exceso. Durante la época franquista bandas nacionales e internacionales como The Who, Jethtro Tull, The Rolling Stones o Blind Faith sufrieron prohibiciones o amputaciones en muchos de los albumes que trataban de distribuirse en la península. De entre la multitud de posibilidades he elegido la canción de Neil YoungCortez The Killer, que el régimen  prohibió para desmentir la descabellada idea de que la conquista de las Américas fue un baño de sangre, y de paso me marco el tanto de mostrar esta versión con Satriani y Grace Potter. Para corazones delicados.




De EEUU como os podéis imaginar hay para dar y regalar. Sobre el 11 de septiembre existen diferentes versiones de si hubo o no censura en las radios y televisiones norteamericanas. Lo que sí parece claro es que se publicó una lista de “canciones no recomendadas” para evitar herir la sensibilidad de la gente. R.E.M., ACDC, Los Bravos, Elvis, Elton John, todas las canciones de Rage Against The Machine....Podéis encontrar absolutamente de todo, pero os aconsejo encarecidamente la lectura de la lista porque hay cosas muy divertidas. Aquí se podría abrir un debate entre la censura y la existencia del menos común de los sentidos ya que sintonizar la canción “jump” de Van Halen quizá no sea lo más apropiado mientras la gente se tiraba por las ventanas pero....





Otra historia interesante de los Esteits la protagoniza la mujer de Al Gore (no confundir con el reclamo a la masiva afluencia al cine de víscera y semejantes) quien se situó al frente de una comisión que cuidaba las almas de los inocentes y luchaba contra el mal del jevimetal y demás músicas envenenadas, denominada Parents Music Resource Center. Por lo que parece, la misión cegadora de la PMRC era demostrar la "relación causal entre el rock y los problemas sociales tales como el aumento de violaciones o el suicidio y embarazos adolescentes". Estas señoras fueron clasificando cuidadosamente  canciones de bandas como Judas Priest, Black Sabbath, Iron Maiden o AC/DC en función de sus referencias al ocultismo, contenido sexual, drogas etc...logrando que el Senado realizara audiencias para investigar la moralidad de las letras en el rock. El encargado de defender a los músicos fue Dee Snider, de Twisted Sister, y en youtube podéis encontrar varias de estas sesiones. Previamente a estas audiencias, la PMRC consiguió que la industria de la música etiquetara los albumes con la mítica Parental Advisory que ha llegado hasta nuestros días. Si tenéis tiempo podéis visionar en documental Dancing with the devil, que trata este tema, la existencia de una ciudad en USA para la desintoxicación de jóvenes adictos al rock...sólo joyas.



Y, como premio para los que habéis aguantado hasta el final sin dormir, dos caramelos. Una colección de 150 anécdotas sobre canciones de rock muy curiosas y que no he resumido, sino que pongo elegantemente el link para que os sirváis, y..... el cantante que ostenta el récord de más canciones censuradas de la historia: Alexander Minto Hughes (2 May 1945 - 13 March 1998), un artista de reggae y ska, que fue el primer artista blanco en entrar en las listas de hits jamaicanas con una canción reggae. Este final me ha quedado currado, currado.